Los Administradores de Fincas andaluces alertan del riesgo potencial de «derrumbe» por instalar piscinas hinchables en terrazas o azoteas sin estudios técnicos que garanticen la seguridad

Los Administradores de Fincas andaluces alertan del riesgo potencial de «derrumbe» por instalar piscinas hinchables en terrazas o azoteas sin estudios técnicos que garanticen la seguridad

  • CAFINCAS advierte del grave riesgo que pueden suponer las piscinas para las estructuras de los edificios por la sobrecarga y el exceso de peso así como posibles filtraciones.
  • Recuerdan además que ni los seguros privados ni comunitarios no suelen cubrir los desperfectos por este motivo.

Andalucía– Pasado el ecuador del mes de Julio y con buena parte de la población disfrutando ya de sus vacaciones estivales, es frecuente que con la llegada de las altas temperaturas muchos propietarios de hogares andaluces se planteen una forma sencilla de mantenerse frescos en casa. Para aquellos que cuentan con terrazas o azoteas privadas en sus edificios, la decisión de instalar una piscina hinchable sin tener antes una serie de consideraciones puede aumentar el riesgo potencial de derrumbe ya que no se suelen tener en cuenta que esas estructuras no están diseñadas para soportar el peso de dichos elementos.


Por este motivo, el Consejo Andaluz de Colegios de Administradores de Fincas -CAFINCAS- advierte que es esencial que antes de tomar esa decisión se analice de forma adecuada y con informes técnicos profesionales si existe el riesgo de producir daños en la estructuras del edificio o poner en riesgo la seguridad de la construcción. Según la presidenta de CAFINCAS, Mercedes Romero “es fundamental contar siempre con una supervisión técnica profesional antes de adquirir la piscina sea cual sea su dimensión para poder garantizar que el forjado del edificio resista ese peso y evitar daños que puedan afectar a toda la comunidad”.


Las dimensiones de esos elementos de ocio acuático suelen dar una sensación equivocada sobre su peso. A modo de ejemplo, una simple piscina infantil de un metro de diámetro puede superar los 200 kilos de sobrecarga que se calcula que tiene una superficie en un bloque de pisos, de ahí la necesidad de contar con un asesoramiento profesional adecuado por parte de otros profesionales como arquitectos o ingenieros de la edificación. Además, hay que tener en cuenta otros aspectos como el riesgo de filtraciones en los pisos inferiores ya que por regla general, el pavimento donde se colocan estos elementos, no está preparado para una acumulación de agua proveniente del desborde de las piscinas.


Balsera recuerda que “si no se tienen en cuenta estas recomendaciones, el riesgo potencial de derrumbe es muy alto, y la seguridad del edificio y de las personas que residen en él debe ser una prioridad en todos los casos”. Ante cualquier duda, los Administradores de Fincas Colegiados, están a disposición de la ciudadanía en los Colegios Territoriales repartidos en las 8 provincias Andaluzas.